La narración, en esencia, es el móvil en torno del cual giran sucesos históricos que cobran relevancia cuando se logra ir sumando unos hechos a otros, vinculando en forma significativa personajes y acontecimientos del pasado con el presente, de tal forma que se culmine incluso en plantear cuestionamientos mediante los cuales se pretenda indagar e intentar dar respuestas que no siempre serán compatibles con el punto de vista de otras personas.
Desde esta perspectiva, la narración contribuye a superar el "presentismo" que en ocasiones se utiliza para "analizar" situaciones actuales, viendo en el pasado la única forma de comprender lo actual, coadyuvando así a concebir la historia como la ciencia que estudia las transformaciones que experimentan las sociedades a lo largo del tiempo y el papel que juegan las personas en ellas.
RECOPILACIÓN
La enseñanza de la historia constituye una labor nada sencilla. En ello se requiere el empleo de estrategias que sean atractivas para los educandos , evitando el incurrir en prácticas monótonas que hagan ver a la historia como una disciplina aburrida, árida, que carece de sentido para sus vidas. Para erradicar esta percepción que se tiene del conocimiento histórico, es preciso hacer uso de recursos y técnicas que faciliten el contacto con el pasado en forma significativa.
Una de las opciones que tiene el historiador para dar auge a lo anterior es la entrevista, la cual se define como "una confrontación interpersonal en la cual una persona (el entrevistador) formula a otra (el respondiente) preguntas cuyo fin es conseguir contestaciones relacionadas con el problema de investigación" (Kerlinger, 2004).
La entrevista constituye una fuente inagotable de información en el marco de la investigación histórica, pues dadas sus características es una técnica de grandes alcances si antes se delimita una situación problema que precise el objetivo a alcanzar, es decir, una pregunta que nos guíe sobre un tema en particular, esto marcará el rumbo a seguir y nos dará pauta para emplear la metodología más adecuada.
Se hace entonces evidente que, en la enseñanza de la historia, el maestro ha de valerse de diversas alternativas que despierten el interés de los alumnos y den sentido a la asignatura. Así pues, actividades como visitas a sitios históricos, entrevistas, investigaciones en equipo, elaboración de líneas del tiempo, historietas, escenificaciones, carteles, narraciones, etc., serán de gran valor para conocer la otra cara del conocimiento histórico, el cual es mucho más que fechas, nombres y batallas.
Mención aparte merece el uso de la tecnología en el proceso del aprendizaje, pues los avances que en ésta tienen lugar día a día no se dan en forma aislada, sino que trascienden significativamente en nuestra vida cotidiana, en todos los ámbitos de la sociedad; por consiguiente, las nuevas generaciones han de ser educadas con el empleo de estos recursos, pues nacieron con ellos y sería antinatural no usarlos cuando se han vuelto diestros en su manejo. Como consecuencia, es el maestro quien se tiene que actualizar y, por qué no, aprender con sus alumnos, adentrándose aún más en los terrenos de la modernización educativa.
Por lo anteriormente expuesto, es obvio señalar la utilidad de recursos como el blog, pues sus alcances trascienden más allá del contexto aúlico y representan una gran alternativa de aprendizaje conjunto si se emplea en forma adecuada, pues abre camino a la retroalimentación y a la coevaluación, los cuales son elementos esenciales en la adquisición de un aprendizaje significativo.
Cabe señalar, sin embargo, que en muchos sectores de nuestra sociedad lo anterior constituye una mera utopía, pues esto pasa a ser irrelevante cuando no se cuenta con los recursos que satisfagan las necesidades básicas para subsistir, y cuando hay escuelas que carecen de lo más elemental para cumplir cabalmente su función. Se entiende entonces que se deben destinar fondos para subsanar esta situación, la cual conduzca a mejoras en la labor social que corresponde desempeñar al maestro,a quien en reiteradas ocasiones se señala como el principal responsable de los magros resultados obtenidos en materia educativa, lo cual a todas luces es injusto.
La entrevista constituye una fuente inagotable de información en el marco de la investigación histórica, pues dadas sus características es una técnica de grandes alcances si antes se delimita una situación problema que precise el objetivo a alcanzar, es decir, una pregunta que nos guíe sobre un tema en particular, esto marcará el rumbo a seguir y nos dará pauta para emplear la metodología más adecuada.
Se hace entonces evidente que, en la enseñanza de la historia, el maestro ha de valerse de diversas alternativas que despierten el interés de los alumnos y den sentido a la asignatura. Así pues, actividades como visitas a sitios históricos, entrevistas, investigaciones en equipo, elaboración de líneas del tiempo, historietas, escenificaciones, carteles, narraciones, etc., serán de gran valor para conocer la otra cara del conocimiento histórico, el cual es mucho más que fechas, nombres y batallas.
Mención aparte merece el uso de la tecnología en el proceso del aprendizaje, pues los avances que en ésta tienen lugar día a día no se dan en forma aislada, sino que trascienden significativamente en nuestra vida cotidiana, en todos los ámbitos de la sociedad; por consiguiente, las nuevas generaciones han de ser educadas con el empleo de estos recursos, pues nacieron con ellos y sería antinatural no usarlos cuando se han vuelto diestros en su manejo. Como consecuencia, es el maestro quien se tiene que actualizar y, por qué no, aprender con sus alumnos, adentrándose aún más en los terrenos de la modernización educativa.
Por lo anteriormente expuesto, es obvio señalar la utilidad de recursos como el blog, pues sus alcances trascienden más allá del contexto aúlico y representan una gran alternativa de aprendizaje conjunto si se emplea en forma adecuada, pues abre camino a la retroalimentación y a la coevaluación, los cuales son elementos esenciales en la adquisición de un aprendizaje significativo.
Cabe señalar, sin embargo, que en muchos sectores de nuestra sociedad lo anterior constituye una mera utopía, pues esto pasa a ser irrelevante cuando no se cuenta con los recursos que satisfagan las necesidades básicas para subsistir, y cuando hay escuelas que carecen de lo más elemental para cumplir cabalmente su función. Se entiende entonces que se deben destinar fondos para subsanar esta situación, la cual conduzca a mejoras en la labor social que corresponde desempeñar al maestro,a quien en reiteradas ocasiones se señala como el principal responsable de los magros resultados obtenidos en materia educativa, lo cual a todas luces es injusto.
Coincido con usted respecto al hecho de que la narrativa sigue siendo un recurso atractivo para la enseñanza de la historia. De manera particular esta estrategia utilizada por mi maestro de secundaria avivó en mí el gusto por la asignatura. Así que continuemos enriqueciendo nuestras clases con este recurso.
ResponderEliminarProfesora Nedelia, su trabajo, en general, está muy completo, hace referencia a todas las estrategias trabajadas durante el curso y destaca la gran importancia que tienen cada una de ellas; y coincido con usted, en cuanto a que las escuelas debes ser dotadas de todos los recursos que exige la educación del siglo XXI.¡Felicidades!
ResponderEliminarMaestra Nedelia, al mencionar usted la narración si lo hacemos en la escuela y con buenos resultados, a esto hemos añadido que también lo actúen o canten.
ResponderEliminarMaestra. También hemos incluido las tecnologías como el scrath, j lic, cmap tools y otros que también de esta manera hacen una narrativa, los alumnos tienen muchísima imaginación, ellos nos enseñan mucho con estos programas.
Gracias maestra por compartir este curso y conocerla gracias por su apoyo.